"Dame, hijo mío, tu corazón, Y miren tus ojos por mis caminos".

Proverbios 23.26

Através de la enseñanza de la Palabra y utilizando los recursos a nuestra disposición, conectamos a la juventud latinoamericana con Jesucristo para convertirlos en verdaderos discípulos y apasionados adoradores.
Nuestra adoración a Dios debe ser en espíritu, constante y sobre el fundamento de nuestra relación con Cristo. Latidos que adoran es la adoración como un estilo de Vida.
El más grande regalo de amor fue el que Dios nos dio a todos al entregar a su único Hijo, este regalo debemos pasarlo a todos aquellos que aún no lo han aceptado. Jesús es el más grande regalo que puedes dar.
Nunca debemos dejar de aprender, sobre todo; aprender de la Palabra. Jeús dijo que si permanecemos en su Palabra seremos verdaderamente sus discípulos y que Su verdad nos hará libres.
Un corazón en constante clamor hacia Dios, una juventud que reconoce que le necesita en sus decisiones, en sus acciones y en cada area de su vida. Estamos formando una generación conectada 24/7 con su creador.
La Fe debe ir acompañada de obras, actos fundamentados en un solo interés, el bienestar de nuestro prójimo. Como un latido de nuestro corazón, estos actos deben ser continuos y no esporádicos.
Nuestra comunidad es una cuyo corazón late por Cristo, cada día busca parecerse más a Él en su actuar, en su hablar. Una generación que le anhela y con pasión espera su venida. Una generación latiendo por Cristo.